El objetivo es cumplir con todos los requisitos y las medidas para preservar la salud de trabajadores y pacientes en el marco de la pandemia por COVID-19.
Durante este lapso, la institución implementó un estricto plan de desinfección y limpieza, que incluyó procedimientos para la manipulación de ropa sucia y residuos especiales.
Todas las tareas fueron supervisadas por personal de Salud Ambiental, la Coordinación Provincial de Fiscalización Sanitaria y el hospital de Cipolletti.
A partir del lunes 11 y hasta el 31 de mayo, se continuará con el plan de acción y se determinará entonces la habilitación total.
El personal de la institución ya realizó el aislamiento obligatorio. Para volver a sus puestos laborales deberán presentar alta médica (para quienes corresponda) y Declaración Jurada obligatoria establecida en el Decreto 359/20.